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IAE Business School

Liderazgo y resiliencia para construir equipos de alto rendimiento

El segundo encuentro del año del Club IFREI, impulsado por la profesora Patricia Debeljuh y el Centro CONFyE del IAE Business School, convocó a líderes de empresas y organizaciones para reflexionar sobre los nuevos desafíos del liderazgo en contextos cambiantes.
Publicado lunes 7 de julio

Se realizó en el campus de Pilar del IAE Business School un nuevo encuentro del Club IFREI, una iniciativa que desde 2010 impulsa el Centro Conciliación Familia y Empresa (CONFyE) bajo la dirección de la profesora Patricia Debeljuh.

Con la participación de asistentes presenciales y más de 50 personas conectadas de manera virtual desde distintos puntos del país y del mundo, el encuentro se centró en “Liderazgo y resiliencia”, con el propósito de ofrecer herramientas para la construcción de equipos de alto rendimiento en contextos complejos.

En la apertura, Patricia Debeljuh dio la bienvenida a los presentes y repasó los principales hitos de la trayectoria del club durante los últimos años, destacando que “el Club IFREI nació como un espacio de diálogo y reflexión entre líderes de organizaciones que creen en una gestión más humana y equilibrada”.

La exposición central estuvo a cargo de Reyes Rite Pérez, presidenta del Instituto para la Resiliencia y el Desarrollo Emocional, y Directora de Integrando Excelencia. En una presentación dinámica y disruptiva, Rite planteó que “estamos en una nueva era, atravesada por la inteligencia artificial, la transformación digital y el cambio permanente; y el liderazgo también debe evolucionar”.

Propuso un modelo que integra el desarrollo personal, ético y emocional del líder con las competencias necesarias para navegar la incertidumbre actual. “¿Cómo puede una organización identificar si sus líderes actuales son los adecuados para el contexto presente? ¿Qué competencias esenciales deben poseer? ¿Se puede medir el liderazgo?”, se preguntó, invitando a repensar paradigmas tradicionales.

Además, enumeró los llamados “objetivos de desarrollo interno” que deben cultivar los líderes del futuro, entre los que destacó el autoconocimiento, la gestión emocional, el bienestar físico y mental, el crecimiento espiritual y la adquisición continua de habilidades. “No tengo poderes para cambiar a nadie, pero sí puedo cambiar las estrategias con las que me acerco al otro”, afirmó, señalando la importancia de construir vínculos más empáticos y efectivos en las organizaciones.

El panel posterior sumó experiencias concretas del mundo corporativo. Marcelo Melamed, vicepresidente ejecutivo de Recursos Humanos de Cirion Technologies, compartió el impacto del programa de reverse mentoring en su compañía. “Fue un desafío, sobre todo para los líderes. Los jóvenes fueron muy valientes y creativos. Con mis mentores, por ejemplo, trabajé en la validación de políticas: yo les preguntaba si lo que iba a implementar tenía sentido o no. Me ayudaron a ver cosas que no estaba viendo”, relató.

Por su parte, Federico Wals, director regional para América Latina de AXON Marketing & Communications, reflexionó sobre el liderazgo intergeneracional y multicultural en equipos distribuidos. “Trabajar con personas de distintas edades y culturas es un desafío. Los miembros de mi equipo tienen la edad de mi hija mayor”, comentó.

En su intervención, también recordó su experiencia junto a Jorge Bergoglio, con quien trabajó previo a su papado: “Fue un jefe impresionante, por su liderazgo, su empatía, su capacidad de asumir los costos. Tengo muchas historias con él. Hemos tenido situaciones de “crisis” en las que para mí era el fin del mundo, pero él entendía que era otro el camino, muchas veces me escuchó con calma y se tomó el tiempo de explicarme por qué no lo haríamos. Me enojé en varias oportunidades y reaccioné mal. Otro me hubiera echado; él me explicó. Esa actitud me marcó”.

Finalmente, Cintia Fernández, directora de Recursos Humanos también en Cirion Technologies, se refirió al desafío de transformar una cultura de trabajo desde dentro. “Pasamos de una cultura del ‘sabelotodo’ a una del aprendiz. Hoy conviven cinco generaciones en la empresa, con personas de entre 20 y 70 años en 11 países. En ese contexto, el reverse mentoring permitió que los jóvenes enseñaran a los líderes. Se anotó mucha gente, seleccionamos perfiles diversos para enriquecer el proceso, y el resultado fue increíble”, destacó.

El cierre del encuentro estuvo a cargo de Patricia Debeljuh, quien moderó un espacio de intercambio abierto entre los asistentes y los expositores. Las preguntas, reflexiones y aprendizajes compartidos consolidaron una vez más al Club IFREI como un espacio vivo, comprometido con una visión integral del liderazgo y la persona en el centro de las organizaciones.